Ideas y Consejos para dedicar más tiempo a la escritura...




Como 2015 aún está en sus inicios todavía es buen momento para replantearse retos y objetivos de escritura para el año y ponerse a trabajar para cumplirlos. Un buen propósito es aprovechar mejor el tiempo y escribir más. Para ello necesitas optimizar tu proceso de escritura: tiempos, calendarios, objetivos, cosas que hacer, cosas que no hacer, etc. Por si no sabes cómo hacerlo, en la entrada de hoy te damos algunas ideas que puedes aplicar.
Crea una lista anual de cosas que hacer

El primer paso es tener claro los objetivos a alcanzar. Así que escribe en un papel la listas de cosas que debes o quieres hacer este año. En esta lista debes incluir también aquellos compromisos, deseos y propósitos de índole personal, familiar o laboral, no solo los de escritura. La idea es, por un lado, tener claro cuán ocupado vas a tener el año, si tienes algún compromiso ineludible en una fecha fija (por ejemplo, la boda de tu prima en Londres); por otro lado, estarás focalizando tus objetivos y propósitos, los pondrás en tu punto de mira para no olvidarte de ellos.

Una recomendación: haz esta lista mejor en un papel y consérvala. Al final del año deberás volverla a mirar para ver si has cumplido con tus compromisos.

Usa un planificador mensual

Ya tienes tu lista de cosas que hacer a lo largo de 2015. Ahora es el momento de repartir las tareas, citas o proyectos a lo largo del año. Crea planificadores mensuales donde poner todas las cosas que tienes que hacer a lo largo de cada mes, tanto personales, por ejemplo, la boda de tu prima en Londres; como relacionadas con la escritura: ese curso al que te has apuntado, escribir entradas para tu blog, asistir a la presentación del libro de un amigo, etc. Calcula cuánto tiempo te llevará ejecutarlas y reserva el tiempo necesario.

Por supuesto, tu prioridad es escribir, así que también debes reservar en tu planificador mensual tiempo para escribir. Trata de reservar tiempo todos los días: lo ideal sería al menos una hora, pero si dispones de más tiempo, mejor. Desglosa el tiempo de escritura en las tareas que vas a realizar: tiempo para documentarte, tiempo para revisar la primera parte de tu novela… Pon las tareas más pesadas en primer lugar y realízalas primero. Dedica también tiempo a la tarea neta de escribir, de avanzar en la historia en la que estés trabajando.

No olvides poner el planificador del mes en curso en un lugar bien visible, donde lo puedas consultar a diario.

Cambia de mentalidad

Lo mejor para luchar contra la procrastinación es la organización. Pero antes de empezar a organizarte, también debes afrontar un pequeño cambio de mentalidad. Sabes que te gusta escribir y te gustaría dedicarle más tiempo a hacerlo, pero te parece que, tal y cómo llevas el día a día, es imposible. Pues bien, debes borrar esas ideas perniciosas de tu cabeza.

Si quieres escribir, escribe. Reserva tiempo para hacerlo cada día y respeta rigurosamente ese tiempo que has reservado.

Piensa bien qué cosas haces que podrías dejar de hacer (ver la tele, trasnochar y levantarte tarde los fines de semana, dormir largas siestas, perder la tarde en un centro comercial…) Todo ese es tiempo que puedes rescatar para la escritura. Simplemente tienes que proponértelo. Piensa que si sigues haciendo las mismas cosas de siempre, es difícil que alcances lo que quieres.

Si reservas tiempo a diario para la escritura comprobarás que te cuesta menos ponerte y retomar el trabajo donde lo dejaste el día anterior. Si además logras dedicar sesiones largas a la escritura (de más de una hora), estas serán más fructíferas.
Seis consejos para acabar

Como resumen, te damos seis consejos para que logres que la escritura encaje en tu día a día.

  1. Anota todo lo que tienes que hacer en los próximos meses en una lista de tareas pendientes.
  2. Identifica los tiempos que tienes disponibles para la escritura y resérvalos. Trata de que sean días consecutivos y sesiones lo más largas posible.
  3. Anota en el planificador mensual todas las tareas que tienes que hacer ese mes. Eso te permitirá tener una imagen completa del mes y te permitirá centrarte cada vez en lo que estás haciendo en ese momento porque sabrás que cada tarea será atendida cuando le corresponde (incluyendo la escritura).
  4. En los momentos que has reservado para escribir, siéntate y escribe. No importa si estás cansado, te han invitado a tomar un café o en ese momento no te apetece. Considera esa cita con tu escritura un momento irrenunciable. Si empiezas a escribir con frecuencia, verás cómo cada vez te cuesta cada vez menos.
  5. Cierra internet. No malgastes preciosos minutos de escritura revisando Facebook. Antes bien, programa en tu calendario el tiempo que dedicarás a tus redes sociales o a contestar correos electrónicos y cíñete al horario que programes.
  6. Ponte un objetivo de escritura para cada sesión: mil palabras, tres páginas. Tener una meta acicateará tus ganas de llegar a ella.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29