Querido hijo...

Eres el responsable de tu vida. En el momento en el que lo reconozcas, habrás conseguido enamorarte de esa vida que es tuya.

Comentarios

Por si te interesa...

Padre Nuestro en Hebreo

Cinco maneras de organizar un libro de poemas.

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 30

Diario de un Estoico II. La posibilidad de lo imposible. Semana 29